Eso es lo que siento cuando te veo: encarcelamiento. Dificultad para centrar mis ideas, pérdida del sentido común, ceguera transitoria, imposibilidad para moverme. No comprendo el por qué aún, pero quiero creer que los motivos existen.

Mi corazón es ahora un rebelde más que va tras sus propias ideas, declarándome hoy su independencia. Ya con sus propias leyes, impide que cualquier cosa que se relacione a vos ingrese a él. Y dentro de esas cosas, estan mis pensamientos.

Cansada ya de luchar, pierdo por abandono. Pero a diferencia de otras guerras, esta no es ganada por nadie. Ni siquiera por vos, que en tu afán de superado vas quedando cada vez mas lejos del sendero de la felicidad. Y eso es lo que hoy me mantiene un poco viva.

De una vez por todas, tanto tiempo después, soy capaz de decir BASTA. Con la mirada un poco baja y la ausencia de sentimientos, es que busco a alguien que me los recomponga. Decidida a no cometer los mismos errores, me encuentro de nuevo. Y quiero volver a reconocerme.